No hay un plato de carne más sencillo que las alitas de pollo al horno, y no solo porque son fáciles de preparar (ninguna carne al horno no es demasiado difícil de preparar). La simplicidad radica en el hecho de que las alas se vuelven sabrosas en cualquier caso, aunque solo estén bien doradas.
Cuando horneamos carne de cerdo, debemos pensar en cómo resultó jugoso, no demasiado magro ni demasiado gordo, para que ella pueda hornear y no secar. Y con alitas de pollo todo es simple: la marinada y la corteza dorada son la clave para el resultado deseado.
Para marinar las alas no se puede buscar nada inusual. El jugo de limón y el adobo de grano de mostaza en vinagre encajarán perfectamente, y la mostaza reemplazará todos los condimentos.
Ingredientes:
- alitas de pollo - 1 kg;
- mostaza granular - 3 cucharaditas;
- jugo de medio limón;
- sal, especias - al gusto.
Tiempo de cocción: 2 horas, cantidad de porciones: 5.
Cocinar
1. Descongelar las alitas de pollo, si están congeladas, enjuague, limpie las plumas y déjelas secar por un tiempo, o seque con una toalla de papel. Para este plato es mejor tomar las alas más grandes.
2. Dobla las alas en un recipiente hondo, agrega el jugo de medio limón a ellas.
3. Luego agregue los mismos granos de mostaza, como "Dijon". Si no existe tal mostaza, puede reemplazarla con una regular. Pero con granular, por supuesto, tendrá mejor sabor.
4. Sal y pimienta alitas de pollo, mezcla todo a fondo. Dejar reposar durante aproximadamente una hora. Si te vas por más tiempo, nada terrible, solo sabrá mejor.
5. Cubra la bandeja para hornear con papel para hornear, engrásela con aceite y ponga las alas. Póngalos en un horno precalentado a 180 grados durante 50 minutos.
6. Las alas confeccionadas deben enrojecerse bien, adquirir una corteza agradable.
7. Coloque las alas aún calientes en un plato, decore con verdes, espolvoree con sésamo si lo desea, y sirva. Puedes comer con tu salsa favorita.